En un mundo que se mueve cada vez más por dinero, ver iniciativas que parten de la solidaridad sin más es poco frecuente.
Solidaridad se refiere al sentimiento de unidad basado en las metas o intereses comunes, o lo que es lo mismo: ayudar sin pedir nada a cambio. El salto cualitativo que está dando la informática y su sofocante ritmo de crecimiento favorecen el gran negocio que hoy es, pero este ritmo de crecimiento también lleva consigo un abaratamiento de costes de producción, que deriva en una fácil accesibilidad. Si a esto sumamos el avance de tecnologías como Arduino o Raspberry Pi y sus infinitas aplicaciones, que funcionan con software libre, y otros productos como son drones, impresoras 3d o smartphones, el resultado es un caldo de cultivo perfecto para que nazcan cada vez más iniciativas independientes.
Ejemplos de solidaridad
Ahora es posible diseñar una prótesis para mutilados de guerra que luego serán impresas en cualquier parte del mundo. De la misma manera podemos usar un dron para ayudar en la búsqueda de un desaparecido, o nuestras redes sociales para ayudar a atrapar a un delincuente.
Ejemplos como éstos deben servir para abrirnos los ojos y hacernos querer ser partícipes de ello. Como seres humanos tenemos el deber de ayudar a construir un mundo mejor, de ser responsables. En SURáTICA creemos firmemente en ello y podemos afirmar que los proyectos altruistas son los que más llenan.
En el año 2017 aportamos nuestro soporte informático a la película «Llueven vacas «, dirigida por Fran Arráez, que narraba el horror de la violencia machista. En este 2018 hemos colaborado con Jose María Azorín en hacer posible la tercera edición de la Tapa Solidaria Almeria. Para ello desarrollamos un software a medida para crear una app que gestionara las donaciones para la Asociación ARGAR y ayudar así a los niños con cáncer… Y si una cosa tenemos clara en SURáTICA es que esto no va a parar.
Este 2019 prometemos seguir ayudando con nuestro Compromiso SURáTICA, que estamos terminando de ultimar. Os animamos a todos a seguirnos en Facebook, Twitter o nuestra propia web para estar al tanto de todas nuestras novedades. Porque si hemos aprendido algo en nuestra trayectoria, es que los proyectos que más nos han llenado no han sido siempre los que más beneficio económico nos han reportado y que tras la conducta de cada uno está el destino de todos.
